8 de julio de 2011

Millones de €.

La crisis económica que está crujiendo a la sociedad y en particular al fútbol español está consiguiendo, desgraciadamente, que veamos situaciones innecesarias de la supuestamente, mejor liga del mundo. Los clubes se están peleando, pisándose los unos a los otros por conseguir el control económico más alto, caiga quien caiga.

El otro día escuché como un periodista le preguntaba a Michel Salgado si habría alguna posibilidad de cambio de jugar en un equipo de mitad de tabla en Premier a un equipo Europa en España, a lo cual contestó que eso no se dudaba, no se piensa, te quedas en la Premier... Y es que los clubes españoles carecen de seriedad económica y no generan la suficiente confianza a los jugadores de otras latitudes. 

El ejemplo es brutal, mientras que el Liverpool, que es el 6º equipo con la Premier, se gasta millones en Luis Suárez e intenta fichar a Santi Cazorla y demás... Tras pasar varios años en sequía, por sus problemas financieros... El Sevilla, en España, se pelea con la Liga y resto de clubes por incrementar sus ingresos televisivos, no por ser bajos los actuales, sino por caché, exigiendo estar a la altura de los equipos de Champions. Genera la mitad y exige lo mismo. No lo entiendo.


Y es que no se nos tomará en serio y lo merecemos.

Mientras en Europa se persigue a los morosos y se controla el gasto en fichajes, en España, la mayoría de los clubes que no están en concurso de acreedores lo están rondando. El ejemplo del Real Zaragoza es una bestialidad. El club entra en ley concursal y a las dos semanas ficha a tres jugadores por 7M€ y negocia para fichar a Pedro León... No se donde vamos a llegar.

El descenso de los clubes en Europa por deudas ha existido toda la vida, clubes que han bajado tres categorías, como el Grenoble en Francia esta misma semana, equipo que el año pasado estuvo en Ligue 1. Aquí pasa todo lo contrario... Hasta Madrid y Barcelona viven con el consentimiento de la Hacienda Pública, lo que significa, con el consentimiento del país y del Estado.

Los miles de millones de € que se estos clubes deben son olvidados de cara al público en general, mientras que los clubes menores, con menos apoyo político y mediático, mueren. 

Ya basta que los clubes hagan lo que les venga en gana, mientras que nosotros estamos perseguidos solo por vivir. Me gusta el fútbol y mucho, pero solo el fútbol, no sus despojos.

Todos sabemos cuanto vale Neymar, Agüero, Sánchez o Cesc, pero nadie sabe donde va ese dinero. Ya basta.

Jesús Verdugo.
Twitter.com   @Verdu8

6 de julio de 2011

El gran salto.

Y estamos de vuelta.

Comienzan las pretemporadas, se sortea el calendario... Bueno, se sortea no, se dice que calendario se ha apalabrado y empieza el chorreo de dinero en fichajes a moverse sin ton ni son, para que a final de Verano tengamos lo que todos esperamos, la Liga BBVA.

Esto funciona como siempre, los grandes gastan mucho y pagan poco, los pequeños gastan menos y pagan menos aún... Y así todo se sigue inflando una burbuja inacabable que algún día reventará, ojalá, para hacer real una liga que no lo es. Principalmente por el desequilibrio Madrid-Barcelona con el resto de los clubes, aunque al parecer, esto ha cambiado... Tenemos un nuevo rico, el Málaga.

El club boquerón se ha instalado a la cabeza del mercado de fichajes, incorporando de la mano de Abdullah ben Nasser Al Thani, un número de jugadores amplio, a base de talonario pero sin quitar los pies del suelo. Se ha fichado bien y a un precio lógico, creando un equipo muy compensado en el terreno de juego y fuera de él.

El proyecto del jeque ha sido creado y dirigido por su técnico, el ingeniero Manuel Pellegrini y por el mejor ojeador y director deportivo de país y posiblemente de los mejores del mundo, el jerezano, Antonio Fernández.



La mano derecha de Monchi en el Sevilla y de Hierro en la selección se ha enrolado en la nave malaguista, que pretende hacer del club andaluz en los próximos años un referente dentro del fútbol español y europeo. Los malaguistas no se pueden creer que ese club que andaba hace 3 años al borde de la desaparición esté saneado, gracias a Fernando Sanz para que de manera consecutiva, tenga un proyecto digno de un grande, en el cual todos los estamentos del club han sido instaurados y creados con profesionales a la cabeza de cada sector.

Lo más importante y envidiable de todo es el tratamiento que, a pesar del talonario, se le está dando a la cantera. Se ha invertido muy seriamente en este campo, que ya de por si, ha sido referente nacional hace años y aunque decayó, con la llegada de Juanmi, Recio e incluido el chiquitín Brahim, han vuelto al primer plano nacional.

La llegada de Julen Guerrero para que se coloque al frente del trabajo en la inferiores es un paso más hacia la excelencia en calidad. El ex-jugador de Portugalete ha trabajado en la cantera del Athletic, ejemplo en este sector, donde ha absorbido los conceptos necesarios que necesitará en su nueva aventura.

No sabremos si el gran salto lo dará el conjunto malagueño este año o el siguiente, pero lo que si queda claro es que, lo consiga o no es que para hacer las cosas bien, hay que tener dinero, luego personal y por último, material.


Jesús Verdugo
Twitter,com   @Verdu8

4 de julio de 2011

Made in China.

Que el negocio del fútbol es más negocio que fútbol no es nada nuevo, es más, se obvia y se entiende a uno con el otro de una manera única e inseparable, lo que convierte a ambos en un producto artificial aunque si rentable.

De como se juega y de quien juega entendemos, o eso parece, la mayoría. Somos los que nos sentamos delante de la televisión a ver cualquier partido en el cual queramos echar algunos minutos de aburrimiento o vaciar en ese espacio nuestro momento de calma y ocio. Pero para que todo eso funcione y llegue a nuestros ojos han tenido que trabajar otros pocos, la otra parte del fútbol, los de la moneda, para que ese jugador vista esa camiseta, con ese patrocinio, esas botas y ante esas cámaras. 

Ni ellos ni nosotros somos los malos, ya que sin nosotros no existiría el negocio suyo y sin ellos, nosotros no tendríamos la posibilidad de disfrutar de las pasiones de la pelota.

Pero los límites se han sobrepasado de tal manera, que se ha perdido la razón, corriendo el riesgo de perder la emoción que dan los domingos de fútbol.

Muchos profesionales, que son eso, profesionales y se mueven por ofertas de trabajo y emolumentos, están dispuestos a cambiar sus vidas diametralmente por el bien de su familia y el futuro de las próximas generaciones de su linaje, embarcándose en alguna liga o mercado exótico, en el cual solo hay dinero y no calidad profesional ni de mejora.

Es fácil caer en el error de culparles de peseteros y de poco amor al club al cual dejan por otro en el que cobrará más, cuando cualquiera de nosotros querría una mejora contractual cada dos días, si fuese posible. Yo preferiría que mi familia pudiese vivir de la mejor manera posible aún viendo como cuatro descerebrados con bufandas, me increpan. El amor principal se debe sentir por los tuyos.


El problema está en lo que hemos consentido hasta llegar a este punto. Somos los primeros que nos quejamos de la desproporción económica que se ve en la calle y las cantidades que mueven los traspasos, para luego ser los primeros en alabar a esa figura que ha llegado a nuestro equipo, consiguiendo así darle lo que quería al magnate, tiempo, televisión y dinero, a fin de cuentas.

Debemos ser más críticos y mirarnos el ombligo a la vez que exigir la limpieza de los clubes, que deben cantidades exorbitadas de dinero a Hacienda sin que aquí pase nada, mientras las familias humildes si serán perseguidas.

El mercado asiático ha entrado en juego y esto puede convertirse en el boom definitivo... Ya nos han cambiado hasta la hora de jugar en nuestro país. 

Darío Conca, para muchos desconocido, pasa a ser el tercer jugador mejor pagado del mundo, hablando únicamente de la ficha que le pagará su club, que por cierto, es de China y para más inri acaba de ascender a la máxima categoría este mismo año... 

Se nos va de las manos, porque ya no solo es una desproporción alejadísima de la razón humana, es que encima no saben fichar... Pero menos mal, ya que ahí está el mayor riesgo del aficionado español...

Si lo ofreciesen la mitad a Santi Cazorla, Thiago Alcântara, Mesut Özil... ¿Crees que se quedarían aquí?



Jesús Verdugo
Twitter.com   @Verdu8